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¡Pero esto es tan difícil! En verdad hay situaciones que nos salimos de casillas y quisiéramos cobrarle al mundo entero nuestras desgracias, rabias y frustraciones, y generamos una malvada cadena donde lo que hacemos es empeorar la situación.
¿Que creen ustedes que puede
pasar si un día llegamos al trabajo y
saludamos a una persona de manera amigable y ella nos hace mala cara, y no
retorna el saludo?:
a. seguimos nuestra vida como si nada,
b. nos llenamos de
rabia y no volvemos a saludarla,
c. la saludamos todos los días para ver cómo sería su
comportamiento.
En muchos casos y ante situaciones similares a estas escucho
que las personas deciden tomar la opción a o
b, en el mejor de los casos. Pero alguna
vez nos hemos sentado a pensar en todo lo que puede estar pasando a esa persona
en ese momento y porque su forma de actuar, es verdad eso no es nuestro
problema; pero tenemos que tener en cuenta que esa persona es un ser humano y
aunque en muchas ocasiones lo correcto es dejar los problemas de la casa en la
casa, es muy difícil para las personas separar
esta situación y vivimos llevando
problemas de la casa al trabajo y viceversa, haciendo que nuestra vida cada vez
sea más complicada.
Quiero invitar a mis contactos a que sumemos a la cadena de
actuar bien y comportarnos con los demás como
quisiéramos que se comportaran con
nosotros. Si no nos retornan el saludo
acercarnos a esa persona y darle un fuerte abrazo, si citamos a alguien a una
reunión o a una entrevista respetar
su tiempo y atenderlo a la hora pactada, si alguien está pendiente de nuestra respuesta contestar lo antes
posible, si alguien nos da mal el cambio informarle que está cometiendo un error, si alguien se
equivoca con la ortografía
corregirlo, siempre con respeto al otro ser y verán que
todo es mejor.
Soy una fiel creyente de la ley de la compensación y siempre que hago las cosas trato
de actuar de la misma manera que quisiera recibir de las otras personas, y
pienso que tarde o temprano todo en la vida se nos devuelve, lo bueno y lo
malo.
¡Entonces los invito a que
hagamos el bien, sin mirar a quién!